Ya pueden disculpar la calidad de la foto pero no estaba en mi mano quitar los coches. Disculpas aparte, tampoco esto es un blog de fotografía, así que les muestro esta casa tal como la vi cuando pasé hace unas semanas por Anguiano. Lo cierto es que si te pones a mirarla con atención, ya no ves los coches sino ese conjunto de piezas tan sobresalientes que componen al buen tuntún una casa de lo más curiosa: la puerta en arco de herradura con un escudete en la clave sin labrar, el gran balcón que preside la fachada a la calle, el escudo que la significa, los tres huecos de la planta baja bastante hundidos, la generosa altura del bajocubierta, ese doble alero (que aunque nuevo, se supone que trata de reproducir al existente), el revocado blanco tan popular con sus azuletes, y más allá, en la esquina, otro escudo y una hermosa solana a Sur. Vista ahora, con más atención a su historia y su fachada, lo que le quitaríamos es ese farolón fernandino de la esquina derecha (!). Veamos la puerta en el hueco que nos dejan los coches aunque ahora son las persianas o las instalaciones las que tratan de distraernos.
De los dos escudos, los del Inventario dicen que el frontal es del XVII y el de la esquina del XVIII.
Divertido el señor con mostacho que aparece por debajo del yelmo en el primero de ellos.
La foto del escudo en esquina ya muestra la diversidad de acabados exteriores de las fachadas a la calle o al sur, pero lo más sobresaliente del giro es esa gran solana doble que abre la casa al paisaje y al mediodía.
Impresionante casa de la que no tenemos por el momento más datos que lo que se ve: la cubierta a cuatro aguas sobre un cuadrado no muy regular de 13,5 metros de lado. En el plano del catastro llama la atención que el jardín a los pies de la solana tenga un raya negra que separa su propiedad respecto de la casa. No tiene mucho sentido pero ya iremos investigando si lo perdió y por qué. Mira que si les diese por construir alguna casa de apartamentos en tan magnífico solar... (!!!).
El águila acompañada de una bordura cargada de candados suele corresponder al apellido Soto (aparece también en Anguiano V).
ResponderEliminarJuan de Soto López y otros de su familia, vecinos de Sevilla, Anguiano y Bobadilla, pleiteaban su hidalguía en 1667. Tal vez les correspondan estos escudos y casas.
Erasmo Robles.
El cuartel que presenta sol, estrella y fuente probablemente corresponda a un linaje DE LA FUENTE, del que serían sus armas parlantes,
ResponderEliminarUn saludo.