Dominando el lado sur de la plaza de Tirgo tenemos una vez más otra casa de planta unitaria y fachada de extraña composición. Está claro que ahora la casa está partida en dos, pero el escudo único y esa pieza sobre cubierta que por su orientación parece un reloj de sol, crean un único eje sobre la unidad de la cornisa y la sillería. La diferencia entre ambas puertas muestra claramente cual fue la antigua, pero lo que es curioso es que ante la diferencia de proporciones entre el lado izquierdo y el lado derecho de la casa, no se eligiera colocarla bajo el balcón central compitiendo con el eje del escudo, sino en esa posición claramente lateral y secundaria.
Sólo las canales y bajantes y la retirada de las palomillas del tendido electrico han cambiado algo el aspecto de la casa durante los últimos treinta años. Pero lo que sí ha cambiado, y mucho, es la plaza, con esa organización de su geometría focalizada en el Ayuntamiento y esos parterres inclinados construidos en acero corten que junto con el arbolado de cipreses, farolas o bancos de rica piedra, dificultan ahora una contemplación algo más sosegada.
Sólo desde una perspectiva sesgada, como si estuviera en una calle y no en la plaza, se la puede ver y fotografiar ahora sin obstáculos.
De la última visita aportamos la imagen de su fachada lateral en sillería concertada y absoluta despreocupación compositiva.
La fachada frontal tiene unos 17 m y la lateral o fondo, 16. En las fotografías aéreas de google earth y catastro puede apreciarse la unidad inicial de la cubierta a tres aguas, ahora retejada por separado, y el "orden" geométrico de la nueva urbanización de la plaza, centrada en el edificio del Ayuntamiento y adornada por farolas colocadas al buen tuntún en las esquinas de los parterres oblicuos o aquí y allá.
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