Quizás por el hecho de compartir construcción en mampostería o porque como venimos diciendo, entre la arquitectura de casas solariegas y la arquitectura en la sierra riojana a veces solo está la diferencia del escudo, el continuum o la homogeneidad de todo el caserío de estos pueblos, desde las construcciones populares hasta las casas del XIX o principios del XX era una realidad, quizás acrecentada, ya lo sé, por la fotografía en blanco y negro, pero hermosa realidad al fin y al cabo.
Entre los detalles colocados sobre las casas que veíamos hace treinta años y las casas nuevas o con nuevos materiales con que se ha venido construyendo últimamente, del excelente ambiente arquitectónico de Ventrosa queda ya muy poco. Pongo aquí algunas fotos de esas casas serranas con dignísimos arcos de medio punto en la entrada.
Algunas ya en ruinas:
Y estas otras casas más de composición más o menos ordenada, con los balcones como elementos protagonistas de la representación social en la arquitectura:
Los aleros cerámicos tuvieron también su momento en las casas de Ventrosa:
Hoy los protagonismos se lo llevan las bajantes y otros detalles chapuceros:
La fragilidad arquitectónica de nuestros pueblos se siente especialmente en Ventrosa, donde los detalles y la nueva forma de construir causan una impresión bastante triste. Desde el mismo punto de la primera fotografía tomé esta otra en mi reciente visita (mayo 2016). No hace falta decir mucho más:
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