La calle Pinar tenía otro sabor en 1983. Aún tenía aceras, pasaban los coches y seguramente aparcaban en la pequeña y singular plazoleta que se abre justo enfrente de esta vieja casa solariega también segada en planta baja por el destino comercial de los nuevos siglos.
El comercio ha renovado su fachada tratando de "empastar" un poco con lo que quedó del piso de arriba, la zona se ha peatonalizado, las aceras y coches han desaparecido y la plaza se ha amueblado con esas ridículas vacinillas de fundición y unos bancos bastante toscos. Todo preparado para sus señorías los peatones y turistas.
Gracias a la pequeña plazoleta nos podemos permitir una visión completamente frontal para hacer notar que la simetría de la planta noble es solo aparente y no geométrica pues el eje está ligeramente desplazado a la derecha. El doble alero sigue la "marca Santo Domingo" porque no recuerdo haberlos visto hasta ahora más que en esta pequeña ciudad. La carpintería y los cristales espejo de los balcones son de una marca bastante más generalizada y vulgar.
Bonito escudo, vive dios. Seguro que alguien sabrá de su familia ¿no? Tenemos también la fecha de ejecución de la fachada, o de la casa, o del escudo: 1698.
La foto del tejado denota que el bajocubierta ha evolucionado mucho. Sobre la pantalla mide 7,2 m de fachada por 19 m de fondo.